SINDICATO Liberaron a las tres detenidas en la protesta de la Maternidad
"El derecho a denunciar no me lo quitan"
Trabajadoras de la Concepción Palacios fueron liberadas con limitaciones
LISSETTE CARDONA
lcardona@el-nacional.com
Apoyada en el brazo de su hija y de uno de sus compañeros de trabajo, Laura Vaamonde bajó como pudo las escaleras que conducen hacia la salida del Palacio de Justicia. Una trombosis la mantuvo alejada del movimiento sindical por un tiempo, pero regresó a la lucha luego de escuchar los múltiples reclamos laborales de sus representadas de la Maternidad Concepción Palacios, donde trabajó por 40 años.
El martes, en el ejercicio de sus labores como secretaria ejecutiva del Sindicato Nacional de Trabajadores de Hospitales y Clínicas, Vaamonde fue golpeada, atropellada y detenida junto con otras dos mujeres: Nairubys Hernández, supervisora de Camareras, y Luisa Romero, supervisora de Atención al Paciente. Llorosas y con el cansancio generado por casi 38 horas de presidio e incomunicación, además de los golpes recibidos en la protesta, las empleadas de la maternidad salieron escoltadas por familiares y compañeros y se unieron al coro que gritaba: "No nos quitarán el derecho a protestar".
El tribunal 48 de Control declaró libertad con restricciones para las tres trabajadoras.
No pueden hablar de su caso.
Vaamonde no puede acercarse a la Maternidad, Romero y Hernández, por estar activas, deben cumplir con sus labores, pero sin acercarse a la directora del centro asistencial, Antonieta Caporale.
"Tengo prohibido entrar a la Maternidad Concepción Palacios y tengo prohibido denunciar lo que pasa, pero no me van a callar porque el derecho sindical no me lo quita nadie. La lucha no ha terminado porque no hemos logrado los objetivos trazados. La lucha continúa", dijo la enfermera jubilada. Agradeció a los oficiales de Policaracas que custodiaron su presidio en la Cota 905: "A pesar de que un grupo de ellos me arrastró, violando mi derecho como mujer y como venezolana, les doy las gracias".
La supervisora de camareras, Nairubys Hernández, defendió nuevamente a sus colegas. "Me siento orgullosa de mis compañeras, que todos los días salen a bregar en una maternidad que vive de carencias".
Desde tempranas horas de la mañana, los familiares se encontraban apostados a las puertas del tribunal. Omar Quintero, esposo de Hernández, se preguntaba qué protección le daría la Lopna a su hijo de 4 años de edad. El infante preguntaba por qué su madre no había llegado. Matilde Lozada, prima de Luisa Romero, denunció que el miércoles en la noche, luego de la suspensión de la audiencia de presentación, fueron sacadas por la parte de abajo del palacio junto con otros delincuentes. "¿Dónde están los derechos humanos y de la mujer? Ellas son trabajadoras no delincuentes, no es justo que las hayan metido presas".
El Ministerio Público precalificó los delitos de lesión genérica en perjuicio de dos funcionarias policiales, agavillamiento y resistencia a la autoridad. El abogado Igor Hernández explicó que fue retirado el cargo de agavillamiento y que protestaron por el cargo de resistencia a la autoridad, pues las agredidas fueron las trabajadoras. Señaló que presentarán los videos que muestran cómo Laura Vaamonde fue arrastrada por el piso de la maternidad y cómo son golpeadas otras enfermeras y camareras por oficiales de Policaracas.
Investigación. El acta que levantaron los fiscales del Ministerio Público 35 y 72, Refino Antonio Cova y María del Carmen Fuentes, respectivamente, en presencia de seis trabajadores y de la directora Antonieta Caporale, consta que la toma fue levantada de común acuerdo "sin ningún tipo de hecho que sea competencia de la presencia fiscal". Sin embargo, uno de los firmantes, el fiscal número 35, será investigado a solicitud de los abogados y del tribunal 48 de control por haber rociado gas paralizante contra los trabajadores que protestaban a las puertas de la dirección.
Recuadro
Violencia contra la mujer
Edgar López
Varias organizaciones de defensa de derechos humanos solicitarán al Ministerio Público que inicie una averiguación contra los funcionarios de la Policía de Caracas que reprimieron a las enfermeras de la Maternidad Concepción Palacios, por la violación de la Ley sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia. En este caso no sólo se trataría de violencia física, sino también de violencia institucional, definida en la ley como "acciones u omisiones que realizan las autoridades, funcionarios y funcionarias, profesionales, personal y agentes pertenecientes a cualquier órgano, ente o institución pública, que tengan como fin violentar, no dar la debida atención, retardar, obstaculizar o impedir que las mujeres accedan a los medios o políticas públicas para asegurar su derecho a una vida libre de violencia". Marino Alvarado, coordinador de Provea, destacó como agravante de lo ocurrido que la Policía de Caracas está limitada a funciones administrativas y no tiene competencia para intervenir en el control del orden público.
Reacciones desde la calle
No son Representativas
La ministra de Salud, María Eugenia Sader, dijo que los trabajadores que protestaron el martes para exigir reivindicaciones laborales no representan 5% de los trabajadores de la Maternidad. La funcionaria destacó que en el centro de salud laboran 1.200 personas, y que las 3 detenidas no eran representativas.
Cabildo rechazó atropello
El Cabildo Metropolitano de Caracas repudió el atropello a los trabajadores de la Maternidad por parte de oficiales de la Policía de Caracas y rechazó las detenciones de las enfermeras. Denuncian que las autoridades intentan criminalizar toda protesta pública y el reclamo de los derechos que realizan los trabajadores y todo aquel que difiere de las acciones gubernamentales.
Entregarán documento a la OEA Un grupo de mujeres, encabezado por la presidenta del Instituto Metropolitano de la Mujer, Lilia Arvelo, entregará hoy un documento a la OEA para denunciar la violación de los derechos humanos de las trabajadoras de la Concepción Palacios. Se reunirán con el embajador Salvador Rodezno, representante de la organización.
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sábado, 29 de mayo de 2010
"El derecho de denunciar no me lo quitan"
SINDICATO Liberaron a las tres detenidas en la protesta de la Maternidad
"El derecho a denunciar no me lo quitan"
Trabajadoras de la Concepción Palacios fueron liberadas con limitaciones
LISSETTE CARDONA
lcardona@el-nacional.com
Apoyada en el brazo de su hija y de uno de sus compañeros de trabajo, Laura Vaamonde bajó como pudo las escaleras que conducen hacia la salida del Palacio de Justicia. Una trombosis la mantuvo alejada del movimiento sindical por un tiempo, pero regresó a la lucha luego de escuchar los múltiples reclamos laborales de sus representadas de la Maternidad Concepción Palacios, donde trabajó por 40 años.
El martes, en el ejercicio de sus labores como secretaria ejecutiva del Sindicato Nacional de Trabajadores de Hospitales y Clínicas, Vaamonde fue golpeada, atropellada y detenida junto con otras dos mujeres: Nairubys Hernández, supervisora de Camareras, y Luisa Romero, supervisora de Atención al Paciente. Llorosas y con el cansancio generado por casi 38 horas de presidio e incomunicación, además de los golpes recibidos en la protesta, las empleadas de la maternidad salieron escoltadas por familiares y compañeros y se unieron al coro que gritaba: "No nos quitarán el derecho a protestar".
El tribunal 48 de Control declaró libertad con restricciones para las tres trabajadoras.
No pueden hablar de su caso.
Vaamonde no puede acercarse a la Maternidad, Romero y Hernández, por estar activas, deben cumplir con sus labores, pero sin acercarse a la directora del centro asistencial, Antonieta Caporale.
"Tengo prohibido entrar a la Maternidad Concepción Palacios y tengo prohibido denunciar lo que pasa, pero no me van a callar porque el derecho sindical no me lo quita nadie. La lucha no ha terminado porque no hemos logrado los objetivos trazados. La lucha continúa", dijo la enfermera jubilada. Agradeció a los oficiales de Policaracas que custodiaron su presidio en la Cota 905: "A pesar de que un grupo de ellos me arrastró, violando mi derecho como mujer y como venezolana, les doy las gracias".
La supervisora de camareras, Nairubys Hernández, defendió nuevamente a sus colegas. "Me siento orgullosa de mis compañeras, que todos los días salen a bregar en una maternidad que vive de carencias".
Desde tempranas horas de la mañana, los familiares se encontraban apostados a las puertas del tribunal. Omar Quintero, esposo de Hernández, se preguntaba qué protección le daría la Lopna a su hijo de 4 años de edad. El infante preguntaba por qué su madre no había llegado. Matilde Lozada, prima de Luisa Romero, denunció que el miércoles en la noche, luego de la suspensión de la audiencia de presentación, fueron sacadas por la parte de abajo del palacio junto con otros delincuentes. "¿Dónde están los derechos humanos y de la mujer? Ellas son trabajadoras no delincuentes, no es justo que las hayan metido presas".
El Ministerio Público precalificó los delitos de lesión genérica en perjuicio de dos funcionarias policiales, agavillamiento y resistencia a la autoridad. El abogado Igor Hernández explicó que fue retirado el cargo de agavillamiento y que protestaron por el cargo de resistencia a la autoridad, pues las agredidas fueron las trabajadoras. Señaló que presentarán los videos que muestran cómo Laura Vaamonde fue arrastrada por el piso de la maternidad y cómo son golpeadas otras enfermeras y camareras por oficiales de Policaracas.
Investigación. El acta que levantaron los fiscales del Ministerio Público 35 y 72, Refino Antonio Cova y María del Carmen Fuentes, respectivamente, en presencia de seis trabajadores y de la directora Antonieta Caporale, consta que la toma fue levantada de común acuerdo "sin ningún tipo de hecho que sea competencia de la presencia fiscal". Sin embargo, uno de los firmantes, el fiscal número 35, será investigado a solicitud de los abogados y del tribunal 48 de control por haber rociado gas paralizante contra los trabajadores que protestaban a las puertas de la dirección.
Recuadro
Violencia contra la mujer
Edgar López
Varias organizaciones de defensa de derechos humanos solicitarán al Ministerio Público que inicie una averiguación contra los funcionarios de la Policía de Caracas que reprimieron a las enfermeras de la Maternidad Concepción Palacios, por la violación de la Ley sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia. En este caso no sólo se trataría de violencia física, sino también de violencia institucional, definida en la ley como "acciones u omisiones que realizan las autoridades, funcionarios y funcionarias, profesionales, personal y agentes pertenecientes a cualquier órgano, ente o institución pública, que tengan como fin violentar, no dar la debida atención, retardar, obstaculizar o impedir que las mujeres accedan a los medios o políticas públicas para asegurar su derecho a una vida libre de violencia". Marino Alvarado, coordinador de Provea, destacó como agravante de lo ocurrido que la Policía de Caracas está limitada a funciones administrativas y no tiene competencia para intervenir en el control del orden público.
Reacciones desde la calle
No son Representativas
La ministra de Salud, María Eugenia Sader, dijo que los trabajadores que protestaron el martes para exigir reivindicaciones laborales no representan 5% de los trabajadores de la Maternidad. La funcionaria destacó que en el centro de salud laboran 1.200 personas, y que las 3 detenidas no eran representativas.
Cabildo rechazó atropello
El Cabildo Metropolitano de Caracas repudió el atropello a los trabajadores de la Maternidad por parte de oficiales de la Policía de Caracas y rechazó las detenciones de las enfermeras. Denuncian que las autoridades intentan criminalizar toda protesta pública y el reclamo de los derechos que realizan los trabajadores y todo aquel que difiere de las acciones gubernamentales.
Entregarán documento a la OEA Un grupo de mujeres, encabezado por la presidenta del Instituto Metropolitano de la Mujer, Lilia Arvelo, entregará hoy un documento a la OEA para denunciar la violación de los derechos humanos de las trabajadoras de la Concepción Palacios. Se reunirán con el embajador Salvador Rodezno, representante de la organización.
"El derecho a denunciar no me lo quitan"
Trabajadoras de la Concepción Palacios fueron liberadas con limitaciones
LISSETTE CARDONA
lcardona@el-nacional.com
Apoyada en el brazo de su hija y de uno de sus compañeros de trabajo, Laura Vaamonde bajó como pudo las escaleras que conducen hacia la salida del Palacio de Justicia. Una trombosis la mantuvo alejada del movimiento sindical por un tiempo, pero regresó a la lucha luego de escuchar los múltiples reclamos laborales de sus representadas de la Maternidad Concepción Palacios, donde trabajó por 40 años.
El martes, en el ejercicio de sus labores como secretaria ejecutiva del Sindicato Nacional de Trabajadores de Hospitales y Clínicas, Vaamonde fue golpeada, atropellada y detenida junto con otras dos mujeres: Nairubys Hernández, supervisora de Camareras, y Luisa Romero, supervisora de Atención al Paciente. Llorosas y con el cansancio generado por casi 38 horas de presidio e incomunicación, además de los golpes recibidos en la protesta, las empleadas de la maternidad salieron escoltadas por familiares y compañeros y se unieron al coro que gritaba: "No nos quitarán el derecho a protestar".
El tribunal 48 de Control declaró libertad con restricciones para las tres trabajadoras.
No pueden hablar de su caso.
Vaamonde no puede acercarse a la Maternidad, Romero y Hernández, por estar activas, deben cumplir con sus labores, pero sin acercarse a la directora del centro asistencial, Antonieta Caporale.
"Tengo prohibido entrar a la Maternidad Concepción Palacios y tengo prohibido denunciar lo que pasa, pero no me van a callar porque el derecho sindical no me lo quita nadie. La lucha no ha terminado porque no hemos logrado los objetivos trazados. La lucha continúa", dijo la enfermera jubilada. Agradeció a los oficiales de Policaracas que custodiaron su presidio en la Cota 905: "A pesar de que un grupo de ellos me arrastró, violando mi derecho como mujer y como venezolana, les doy las gracias".
La supervisora de camareras, Nairubys Hernández, defendió nuevamente a sus colegas. "Me siento orgullosa de mis compañeras, que todos los días salen a bregar en una maternidad que vive de carencias".
Desde tempranas horas de la mañana, los familiares se encontraban apostados a las puertas del tribunal. Omar Quintero, esposo de Hernández, se preguntaba qué protección le daría la Lopna a su hijo de 4 años de edad. El infante preguntaba por qué su madre no había llegado. Matilde Lozada, prima de Luisa Romero, denunció que el miércoles en la noche, luego de la suspensión de la audiencia de presentación, fueron sacadas por la parte de abajo del palacio junto con otros delincuentes. "¿Dónde están los derechos humanos y de la mujer? Ellas son trabajadoras no delincuentes, no es justo que las hayan metido presas".
El Ministerio Público precalificó los delitos de lesión genérica en perjuicio de dos funcionarias policiales, agavillamiento y resistencia a la autoridad. El abogado Igor Hernández explicó que fue retirado el cargo de agavillamiento y que protestaron por el cargo de resistencia a la autoridad, pues las agredidas fueron las trabajadoras. Señaló que presentarán los videos que muestran cómo Laura Vaamonde fue arrastrada por el piso de la maternidad y cómo son golpeadas otras enfermeras y camareras por oficiales de Policaracas.
Investigación. El acta que levantaron los fiscales del Ministerio Público 35 y 72, Refino Antonio Cova y María del Carmen Fuentes, respectivamente, en presencia de seis trabajadores y de la directora Antonieta Caporale, consta que la toma fue levantada de común acuerdo "sin ningún tipo de hecho que sea competencia de la presencia fiscal". Sin embargo, uno de los firmantes, el fiscal número 35, será investigado a solicitud de los abogados y del tribunal 48 de control por haber rociado gas paralizante contra los trabajadores que protestaban a las puertas de la dirección.
Recuadro
Violencia contra la mujer
Edgar López
Varias organizaciones de defensa de derechos humanos solicitarán al Ministerio Público que inicie una averiguación contra los funcionarios de la Policía de Caracas que reprimieron a las enfermeras de la Maternidad Concepción Palacios, por la violación de la Ley sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia. En este caso no sólo se trataría de violencia física, sino también de violencia institucional, definida en la ley como "acciones u omisiones que realizan las autoridades, funcionarios y funcionarias, profesionales, personal y agentes pertenecientes a cualquier órgano, ente o institución pública, que tengan como fin violentar, no dar la debida atención, retardar, obstaculizar o impedir que las mujeres accedan a los medios o políticas públicas para asegurar su derecho a una vida libre de violencia". Marino Alvarado, coordinador de Provea, destacó como agravante de lo ocurrido que la Policía de Caracas está limitada a funciones administrativas y no tiene competencia para intervenir en el control del orden público.
Reacciones desde la calle
No son Representativas
La ministra de Salud, María Eugenia Sader, dijo que los trabajadores que protestaron el martes para exigir reivindicaciones laborales no representan 5% de los trabajadores de la Maternidad. La funcionaria destacó que en el centro de salud laboran 1.200 personas, y que las 3 detenidas no eran representativas.
Cabildo rechazó atropello
El Cabildo Metropolitano de Caracas repudió el atropello a los trabajadores de la Maternidad por parte de oficiales de la Policía de Caracas y rechazó las detenciones de las enfermeras. Denuncian que las autoridades intentan criminalizar toda protesta pública y el reclamo de los derechos que realizan los trabajadores y todo aquel que difiere de las acciones gubernamentales.
Entregarán documento a la OEA Un grupo de mujeres, encabezado por la presidenta del Instituto Metropolitano de la Mujer, Lilia Arvelo, entregará hoy un documento a la OEA para denunciar la violación de los derechos humanos de las trabajadoras de la Concepción Palacios. Se reunirán con el embajador Salvador Rodezno, representante de la organización.
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