Alimentos continúan siendo principales sospechosos del brote de Chagas

Enfermedad Advierten que hay contradicciones en informaciones ofrecidas por el Ministerio de Salud
Alimentos continúan siendo principales sospechosos del brote de Chagas
El infectólogo José Antonio Suárez advierte que, por sus características, la forma de contagio en el caso de Antímano fue oral

Lissette Cardona
lcardona@el-nacional.com
Simón González
sgonzález@el-nacional.com

En 2007 la información sobre la detección del mal de Chagas en 120 personas de la escuela Andrés Bello de Chacao, recordó a la comunidad médica la existencia de una forma de transmisión de la enfermedad parasitaria poco conocida: la vía oral. Para el infectólogo y pediatra del Instituto de Medicina Tropical de la UCV, José Antonio Suárez, el episodio sentó un precedente para el abordaje de esta dolencia, pues demostró que el consumo masivo de alimentos podía desencadenar brotes de la enfermedad, como ha ocurrido en Venezuela y en otras regiones del Suramérica. El experto señala que, basado en su experiencia, el brote de Chagas ocurrido en la comunidad de La Pedrera en Antímano, por sus características, también podría tener origen en la ingesta de alimentos contaminados. Suárez indica que no se conocen casos en los que se transmita a través de vectores (insectos) simultáneamente a varias personas y en la misma comunidad. "Es poco probable que un chipo tenga la capacidad de atacar a 16 personas a la vez", señala. Todos los brotes ocurridos en Venezuela en los últimos 5 años son de origen oral; es decir, adquiridos por alimentos. En 2005, cuatro ancianos de San Juan de Los Morros fueron diagnosticados con Mal de Chagas agudo por esa causa. Luego varios médicos de Barinas enfermaron por ingesta de alimentos.
     Vías de transmisión. El parásito Trypanosoma Cruzi tiene varias formas de llegar al cuerpo humano. La más conocida es la picadura del chipo, un insecto vector que transporta el parásito y lo expulsa a través de las heces. Cuando pica al ser humano y éste se rasca, se infecta y enferma. Existen también otras formas de transmisión, pues también puede pasar de la madre al niño y puede adquirirse a través de trasfusiones y trasplantes de órganos. El pediatra recuerda que en 2006, el Ministerio de Salud de Brasil confirmó un brote de Chagas en una comunidad amazónica debido al consumo de frutas en las que los insectos habían defecado. Desde 1960, el organismo brasileño tiene registros de la contaminación con el parásito por la ingesta de alimentos que estuvieron en contacto con un vector. Otro de los casos que sienta precedente es el brote ocurrido hace un año en Chichiriviche de La Costa, en Vargas. 47 niños y 4 adultos de la escuela Rómulo Monasterio ingirieron un jugo de guayaba contaminado con el parásito. El pasado martes, la jefa de la Dirección de Epidemiología del Ministerio de Salud, Miriam Morales, dijo que estaban descartadas las posibilidades de que el brote sucedido en Antímano fuera consecuencia del consumo masivo de algún alimento; sin embargo, ese señalamiento es confuso pues ella misma advirtió que no se había determinado si los contagios del actual brote fueron por vía vectorial u oral. El ministro de Salud, Luis Reyes Reyes, informó que no se han detectado nuevos enfermos con el mal. Indicó que se tomaron muestras de sangre a todas las familias habitantes de las 58 casas del sector.
     Cifras van y vienen. Las autoridades del Ministerio de Salud han incurrido en contradicciones en cuanto al número de víctimas. El viernes 8 de mayo se informó de 4 personas hospitalizadas. La directora nacional de Epidemiología, Miriam Morales, indicó un día después que había 17 personas contagiadas. El pasado lunes, el Ministerio de Salud informó que había 19 hospitalizadas por esta causa; no obstante, ayer el ministro Luis Reyes Reyes habló de 15 afectados. Las instituciones tampoco han esclarecido si la muerte de un niño de un año de nacido, que habitaba en el barrio 10 de julio en La Pedrera, obedece al Mal de Chagas días antes de que se conociera el brote, aun cuando los familiares presumen que éste fue el motivo.

     Vigilancia
     El tercer plan de La Pedrera se convirtió en el centro de operaciones en contra del Mal de Chagas en la parroquia Antímano. Desde este punto comenzaron a actuar las brigadas de salud comunitarias que se encargan de ofrecer información a los habitantes sobre los cuidados que deben tener para evitar contraer la enfermedad. Estas cuadrillas están organizadas por el Ministerio de Salud, el Gobierno del Distrito Capital y la Alcaldía de Libertador. En la actualidad se tratan de más de 70 personas repartidas entre promotores de salud de Libertador y vecinos de la localidad. En el operativo también incluye una cuadrilla del ministerio que fumiga las casas. Carmen Milanés, trabajadora de la Dirección de Salud de Libertador, indicó que en las próximas horas se trasladarán hasta zonas cercanas, como Torres de Santa Ana, El Refugio, la Colmena, Matapalo y el resto de los planes de La Pedrera. "La idea es cubrir toda la parroquia", acotó. La Alcaldía Metropolitana también inició ayer una jornada de fumigación en la parroquia, empezando por las calles El Rosario y Cruz Verde. La Dirección de Salud de Miranda declaró la alerta y vigilancia epidemiológica en la región, pese a que no se han presentado casos de la enfermedad, como una forma de estar alerta ante la situación que se presenta en Caracas.